
La felicidad también existe en las residencias de ancianos
La vida se divide en una serie de etapas de las que nadie podemos escapar. La primera, la infancia, es la del ocio. La segunda, la de la adolescencia, es la que permite sentar las bases de nuestro futuro. Convertidos en adultos, llegamos a una etapa marcada por el estrés, las preocupaciones y también a una etapa cargada de emocionantes momentos como una boda o el tener descendencia. Finalmente, la vejez es una etapa que se contrapone a la anterior